Mantras mexicanos para la liberación del espiritu
Prem Dayal
Introducción
El libro ¡me vale madres! habla sobre encontrar nuestro
verdadero yo y fue escrito por Prem Dayal, una persona que dice la realidad y
nos describe los mantras mexicanos pero quizá hasta cierto un poco ofensivo
para ciertas culturas o religiones, pero si nos ponemos a pensar es muy cierto
lo que dice y muchas veces no lo queremos ver así, por el simple hecho de
sentirse pecador.
Dios es alguien quien crea cosas maravillosas en el planeta
y no solamente las crea sino que está en todo lo que está a nuestro alrededor
simplemente que muchas veces no nos damos cuenta y por ese motivo lo estamos
buscando para encontrar la paz y quizá también para pedirle milagros.
Dios crea unas personas con características físicas
similares pero no iguales, por lo tanto todas las personas somos diferentes de
alguna manera, porque él se esfuerza en hacer personas únicas; un bebé es
alguien puro sin ningún tipo de maldad, una persona que no sabe que es la
envidia, los berrinches, egoísmo entre otras cosas parecidas. Un bebé o niño
crece en un ambiente de adultos con una sociedad que lo conforman sus padres,
maestros y religiosos, y son ellos quienes realmente lo convierten y lo enseñan
a ser una persona diferente y a olvidarse de quien es él y que quiere, solo con
el simple hecho de cumplir las expectativas que tienen los padres, maestro o
los religiosos sobre el niño.
Un padre crea al niño de acuerdo a lo que a él le gustaría
que fuera, y lo enseña a fingir a ser alguien más. Pero como esta situación se
da en cultura en cultura entonces todos los que estamos en el planeta Tierra
estamos jugando a ser alguien más por este motivo muchas veces nos cuesta ser
quien somos y de hecho existe un dicho que dice “me ha costado ser quien soy” y
la pregunta es ¿porque? Claramente la respuesta es porque no somos nosotros.
El amor no existe, lo que existe es una clase de negociación
y prostitución y un ejemplo claro de este es: si tú me amas, yo te amo. Una vez
que ya se plasmó el negocio después sigue la prostitución. El amor no consiste
en eso, el amor es dar todo sin recibir nada a cambio.
Tenemos que dejar que Dios nos guie y no dejarnos llevar por
los comentarios de los demás, cuando nosotros hagamos lo que nos dicte el
corazón sin importar lo que digan los demás es porque vamos en el camino
correcto, en el camino en el que nosotros queremos estar.
Muchas veces no hacemos tantas cosas por el simple hecho de
pensar que si lo hacemos estaremos pecando y por lo tanto cuando se llegue el
día de la muerte nos iremos al infierno. Pero no pensamos que solo tenemos una
vida y tenemos que hacer lo que nos guste y no jugar a ser alguien más o
intentar serlo.
Dios es bueno y él nos creó para aceptarnos tal y como
somos, todo lo que nos dio, no lo dio para gozar y disfrutar de la vida sin
preocupación; pero muchas veces nos dejamos influir por cosas que están
escritas que según los demás son las cosas correctas e incorrectas. No se le tiene que tener miedo a
Dios él nos creó a la perfección.
No tenemos que esperar que todo nos llegue a las manos y que
todo sea milagro, pues Dios solo se encargó de crearnos y nuestro camino
nosotros solos no lo creamos. No tenemos que esperar a que Dios nos de dinero,
trabajo o algo parecido, cuando nosotros realmente estamos sentados sin
intentar mover solo un dedo.
El mantra mexicano consiste en rezar y decir me vale madres
cuando nosotros no queremos hacer o comprometernos en hacer algo. Solo tenemos
que meditar y respirar profundo y tratar de encontrar nuestro verdadero yo,
para poder liberar nuestro espíritu, dejando a un lado los prejuicios y todo lo
negativo que tenemos. Pero no hay que mal interpretar el mantras mexicano, es
para hacer lo que nos complazca más no para liberarnos de nuestras
responsabilidades.
Hay un dicho que dice: no hay nada mejor que cada quien hago
lo se le dé la gana, este es más que claro, si todos hiciéramos esto todos
seriamos felices y nos conoceríamos nosotros mismo. Es difícil saber quiénes
somos realmente y esto se debe a que lo olvidamos desde pequeños y por eso se
dice que este es el mundo de los muertos viviente, porque se dice que estamos
vivos por el simple hecho de respirar pero nos vivimos nuestra vida. Es difícil
querer conocer a alguien más, cuando nos sabemos quiénes somos nosotros.
Para poder estar bien con las personas que no rodean es
mejor olvidar todo y decir la oración de los mantras mexicanos y decir me vale
madres, me vale madres, me vale madres y porder amar olvidándonos del pasado y
del futuro. Tenemos que vivir el presente dia a dia y nunca tenemos que dejar
las cosas para mañana, porque mañana puede ser demasiado tarde.
Muchas veces pensamos que todo es de nosotros, pensamos que
la casa, el carro, los hijos, el esposo e incluso el cuerpo es nuestro, pero en realidad nada es de
nosotros todo es prestado porque tarde o temprano se va a llegar el momento de
nuestra muerte y no nos vamos a llevar nada.
Los mantras mexicanos ni nosotros los conocíamos sino fueron
unos monjes tibetanos quienes vinieron y se dieron cuenta que aquí en México utilizábamos
términos como ¡me vale madres!, ¡a la chingada!, ¡no es mi pedo! Para liberarnos
de las ataduras del mundo interior, no las del mundo exterior.
Conclusión
Este libro sin duda alguna tiene la finalidad de
encontrarnos a nosotros mismo y dejar de fingir ser alguien más que la sociedad
quiere de nosotros.
Nosotros tenemos que hacer lo que nos guste porque puede ser
nuestro último día de vida y para poder liberarnos muchas veces es necesario
decir ¡me vale madres!, pero nunca ser una persona irresponsable.
Es un libro que nunca imagine que hablara tanto de Dios y
nos dice que Dios está a nuestro alrededor y es todo así como las plantas,
animales, aguas etc. es mas Dios está dentro de nosotros y no es necesario
buscarlo, solo nos tenemos que tratar de conectar espiritualmente con El. Una vez
que ya lo encontramos solo nos tenemos que dejar llevar por nuestros gustos,
dejando a un lado el sentirse pecador y las críticas de la sociedad. Tenemos que
pensar claramente que es lo que queremos para no llegar a viejos y decir: como
me hubiera gustado hacer eso o sentir que desperdiciamos la vida estresándonos y
llenándonos de preocupaciones.
En este momento solo quiero estar en paz y vivir la vida día
a día.
Bibliografía
¡Me vale madres!: Mantras mexicanos para la liberación del
espírit. Prem Dayal. Random House Mondadori México, 2012
OK Nalle bien por tus comentarios....
ResponderBorrarSaludos,
AB